La nueva serie de Netflix, ‘Between‘, nos lleva por el camino del aislamiento. Un tema no muy original, que además está en boga en los últimos tiempos y que nos ha hecho reír mucho con otras producciones como ‘Under The Dome‘, que estrena este verano su tercera temporada.

En Pretty Lake, a diferencia de la de la cúpula, las cosas parecen más explicables (al menos no tan alienígenas) y la confianza en que se podrá salir del aislamiento es mayor. Al fin y al cabo lo único que impide la salida del pueblo son vallas y policía.

Las incógnitas se han ido acumulando durante estos dos pasados capítulos y lo primero que surge comentar sobre ella es que hay demasiados personajes como para mantener el orden sobre ellos y enterarse de qué palo va cada uno. En cierto modo esto puede ser una estrategia para mantener el misterio de los espectadores, pero también es confuso.

Surgen, como es natural líderes. Algunos líderes naturales, como Gord (Ryan Allen), otros con ganas de mandar como Chuck (Justin Kelly). En este sentido Chuck es un personaje interesante, como lo fue en su día Big Jim (Dean Norris) en ‘Under The Dome‘. No es malo, no es bueno. Tiene sus propios ideales y lucha por lo que interesa, que en ocasiones coincide con lo que le interesa a la mayoría. Y desde luego le gusta mandar, eso está claro.

Que todos en la serie tengan que tener menos de 22 años hace que varios personajes tengan que adoptar edades mayores a las que tienen realmente. Mientras Chuck no se quita la cazadora del instituto, Gord y Melissa (Brooke Palsson), la hermana de Wiley (Jennette McCurdy), tienen un aspecto mucho más mayor que el resto. Con Gord me pregunto constantemente cuántos años tiene, porque no parece tener menos de 21 sino unos cuantos más.

En el capítulo de hoy nos han ido insinuando que las barreras no se levantarán una vez quemados los cuerpos, a pesar de que eso es lo que haría las cosas más fáciles, sería también lo que acabaría con la trama de aislamiento y embotellamiento.
Pero aunque los propios protagonistas lo saben, nadie parece decir nada al respecto.

Otra cosa que la serie se ha decidido callar es eso de que lleven 14 días en aislamiento y que haya gente que siga teniendo a sus muertos a disposición, que no los haya enterrado. El niño ese incluso tenía a su padre encima de la mesa como si nada. Esa ciudad debe oler a podrido que da asco. Y no es por ser maleducada.

Cabe preguntarse el porqué la gente de fuera no provee de alimentos y provisiones a la gente de dentro, el porqué los dejan morir de esa manera, sobre todo ahora que se sabe que los menores de 21 no están muriendo.
A las incógnitas de la serie también podríamos añadir el porqué sólo pasa en Pretty Lake y no a los soldados que están fuera, que están a la distancia de una valla. También por qué la serie se llama «Between», «entre medias», y si es porque están «between the fences» me parece una excusa muy mala.

El papel de los malos del grupo, Pat (Jim Watson) y Ronnie (Kyle Mac) tiene que ser más grande que el de molestar, porque sino a estas alturas estarían ya muertos.
¿Tendrá esta serie misterios escondidos tan descabellados como el de otras series de este tipo?
¿Qué os está pareciendo hasta ahora? ¿Tenéis ya personaje favorito? ¿Os aclaráis con los nombres? ¿Quién es el loco que mató a Amanda (Krystal Hope Nausbaum) y le cortó el dedo a la otra colega?