‘The Walking Dead’ prosigue su 7ª temporada con calma y sin mucha prisa por que sus personajes avancen. Aún encima, al apocalipsis zombie, se unen grupetes cada vez más raros… ¿Es esto un festival zombie? Si aún no habéis visto el capítulo, no sigáis leyendo, esta entrada podría contener spoilers.
Con Daryl (Norman Reedus) oculto en el Reino, el rey Ezekiel (Khary Peyton) ve la oportunidad perfecta para que Carol (Melissa McBride) regrese de su exilio voluntario.
Mientras tanto, Rick (Andrew Lincoln) y su grupo deciden ir en busca de una nueva y misteriosa agrupación, que mantienen cautivo al padre Gabriel (Seth Gillian) y con quienes Rick pretende pactar.
La verdad que ‘The Walking Dead’ se está convirtiendo en «The Coñazo Dead», porque vaya capítulos tan insípidos que nos están dando esta temporada, ¿no? Un inicio tan potente, cargándote a dos personajes, uno de ellos de los originales y uno de los más queridos de la serie, convirtiendo a un personaje tan icónico y representativo de la serie como Daryl en esta persona tan apagada y asustadiza… Algo estáis haciendo mal, queridos guionistas.
Porque ni abrazo Caryl, ni Daryl haciendo de príncipe azul yendo a rescatar a Carol… Menos amor, y más acción. Porque mientras Carol disfruta de sus vacaciones zombies, apartada del Reino, no sólo Daryl se disputa su amor, sino también el Rey Ezekiel, quien parece empeñado en que Carol vuelva… ¿Por qué?
Y en algún lugar, Rick y compañía encuentran a una extraña tribu/agrupación/grupo o como queráis llamar a esta gente nueva. Gente que vive en un lugar construido a base de murallas de mierda (un caso grave de síndrome de Diógenes), y que tienen secuestrado a Gabriel. Pues bien, Rcik decide ir allí no sólo a recuperar al cura, sino también a hacer un trato con los Diogénicos (llamésmoles así mientras no les asignen un nombre).
Pues resulta que el pobre Rick, aparte de escalar una montaña de basura, le toca enfrentarse a un engendro de caminantes, recubierto de estacas y hierros, prueba que debe superar si, de alguna manera, quiere pactar algo con esta gente.
Y, obviamente, como Rick (y Michonne (Danai Gurira) también andaba por ahí) usa el cerebro, consigue librarse del extraño caminante, y consigue, también, lo que venía buscando desde un principio: un pacto para enfrentarse a Los Salvadores.
Cada vez más gente se une a la causa de Rick contra el grupo que Negan (Jeffrey Dean Morgan) forma, pero hay un problema que debe preocuparles: ¿cómo conseguirán las armas para derrotarles? Esperemos que de alguna manera que los 6 capítulos restantes sean más amenos, por favor.
¿A vosotros qué os ha parecido el capítulo? ¿Os ha gustado? ¿A qué viene meternos con calzador a Carol y a sus pretendientes? ¿No es el rey Ezekiel un personaje un poco inútil? ¿Conseguirán unirse todos y derrotar a Negan? ¡Animaros a comentar vuestras impresiones con nosotros!