‘The Vampire Diaries’ está a nada de decirnos adiós para siempre y, sin embargo, y a solo un episodio de esa despedida, todavía no vemos muy claro hacia dónde pretende llevarnos Julie Plec. ¿Será capaz de dar sentido y cerrar congruentemente todas las tramas que todavía siguen abiertas? Es muy complicado complacer a todo el mundo después de 8 años en antena, pero eso tendremos que juzgarlo la semana que viene.
A pesar de los intentos de todos los personajes de la serie y de nuestras ganas de verla, Katherine (Nina Dobrev) no se ha dignado a aparecer. Hemos tenido que conformarnos con ese “something borrowed” y más miembros impertinentes del clan Donovan.
Invocar a la nueva señora del Infierno con la boda de Stefan (Paul Wesley) y Caroline (Candice King) parecía el movimiento correcto, pero probablemente al ser tan evidente ya podíamos hacernos a la idea de que no iba a funcionar.
De cualquier forma, y aunque no ha habido incidentes (al menos en la ceremonia), ha sido imposible centrarse en el único momento enteramente feliz y optimista de esta temporada. ¿Disfrutar de una boda entre dos de los personajes principales? ¿Con el historial de la serie en lo que a bodas respecta y sabiendo que el fin está tan cerca? Ni Damon (Ian Somerhalder) podía dejar de mirar a su alrededor buscando cualquier indicio de que fuese a aparecer una Katherine fuera de sí y rompiendo cuellos en la boda de su hermanito al más puro estilo Kai (Chris Wood).
Si en algo hemos notado que el final está cerca ha sido en esos throwback speeches de los protagonistas. Alaric explicándole a Dorian (Demetrius Bridges) su trayectoria por Mystic Falls, Damon poniéndose tierno con Caroline o haciéndole un recap de villanos a Stefan… Parece que todos tienen ganas de llevarse bien con todos ahora que el campamento llega a su fin, porque hasta Bonnie (Kat Graham) ha sacado la bandera blanca presentándose en la boda del que mató al amor de su vida.
Pero claro, cuando tantas cosas salen bien solo significa que lo peor está reservado para los últimos 10 minutos de capítulo. Y, ¿a quién le ha tocado protagonizar la agonía? Una vez más, a Bonnie. Para no perder la costumbre, claro que sí. Porque después de perderlo todo y haber encontrado consuelo en mantener un pequeño vínculo con su novio muerto con el que podían tener mini-citas en el limbo, el siguiente paso para ella no podía ser otro que forzarla a elegir entre su vida o esa conexión con Enzo (Michael Malarkey).
Para nuestro consuelo, la despedida entre ambos ha sido una maravilla y siguen posicionándose como la mejor pareja de la serie, ya ni nos acordamos de quién es Elena (Nina Dobrev). Aunque, Enzo, amigo, antes le dices que viva su vida y antes se desploma en el suelo con la nariz sangrando. No tenemos ni idea de qué quiere decir esto ni de por qué lo comparaban con la muerte de la madre de Matt (Zach Roerig), pero una de las razones por las que queremos ver terminar esta serie es para que dejen de torturar a Bonnie porque parece que lo hacen ya por vicio.
No nos sorprende que la jugada maestra que Katherine está planeando sea destruir Mystic Falls, al fin y al cabo, es lo único a lo que todos los personajes le tienen un mínimo de aprecio, así que será bonito ver cómo hacen lo posible por detenerla.
¿Cómo os imagináis el último episodio de la serie? ¿Qué personajes creéis que no pueden faltar? ¿Estáis preparados para el final de ‘Crónicas Vampíricas‘?