Lo bueno de ‘The 100’ no es que cada vez esté creciendo más y más, es que acabamos de presenciar uno de los mejores capítulos de la serie y solo es el tercero de esta temporada. Ya no hay lugar para discutir sobre ‘ships’, aquí lo importante es que una guerra está a punto de desatarse entre unos y otros y no tiene pinta de que vaya a ser poca cosa.
MA-DRE-MÍA todo lo que ha pasado en tan solo 40 minutos, quién nos iba a decir que aquella serie que empezó siendo tan poco interesante acabaría convirtiéndose en un fenómeno tan gigantesco y de tanta calidad. Pero si nos ponemos a repasar lo que ha cambiado ‘The 100’ no acabamos nunca, así que comentemos lo importante: la guerra que está a punto de estallar entre los clanes ‘grounders’.
Nia (Brenda Strong), la reina de la Nación del Hielo, se ha montado un plan maestro que nadie ha visto venir ni de lejos. Con Echo (Tasya Teles) como traidora total, engañando a Bellamy (Bob Morley) y al resto para que se marchasen de Mount Weather, la Nación del Hielo asesina de un plumazo a todos aquellos que se habían trasladado hasta la montaña, más concretamente todos los que estaban con Pike (Michael Beach) anteriormente.
Pero antes de que todo esto ocurriese hemos podido ir vislumbrando de qué bando se posiciona cada uno. Clarke (Eliza Taylor), aún enfadada con Lexa (Alycia Debnam-Carey) por la traición de Mount Weather (no mientas Clarke, tú habrías hecho lo mismo si el trato te lo hubiesen propuesto a ti), casi cede a la idea de Roan (Zach McGowan) de acabar con la Commander, pero por una razón o por otra la temible Wanheda no es que no sea capaz de acabar con Lexa, si no que además acepta el trato de esta de convertir a los ‘skikru’ en parte de los clanes bajo el mandato de Lexa.
Sabemos que a estas alturas Lexa se arrepiente del daño que le hizo a Clarke, y para enmendar su error les promete su protección y un lugar entre sus clanes, a pesar de que algunos de ellos se sorprendan o se opongan. Kane (Henry Ian Cusick) y Abby (Paige Turco) apenas dudan en aceptar, sabedores del poder que tiene la Nación del Hielo y de que ellos por sí solos son incapaces de ganar una hipotética guerra. Pero como era de esperar, no todos ven estas nuevas relaciones con buenos ojos, lo que no nos esperábamos son las decisiones que toman algunos de ellos.
Como por ejemplo sí, Bellamy. El que fue héroe de la segunda temporada, uno de los personajes más queridos de la serie, hermano de la más que ‘grounder’ Octavia (Marie Avgeropoulos) y el primero en confiar en Echo, empieza a posicionarse muy a favor de los ideales radicales de Pike, donde todo aquel que no haya nacido en el Arca es malo, asesino y mentiroso. Entendemos que entre los ‘skaikru’ y los ‘grounder’ han habido muchas diferencias, muchas muertes y muchas disputas, pero ahora mismo el enemigo que tienen en común debería ser suficiente para que dejen esas guerras personales a un lado y conseguir así la paz definitiva en el futuro. A pesar de todo,esto no es ni mucho menos lo que Pike quiere (el último en llegar y el que va a liarla parda), y Bellamy poco a poco también va renegando de quienes llevan tantos años viviendo en la tierra y pareciéndose a lo que en su día fue Finn (Thomas McDonell). Él, una de las manos ejecutoras de Mount Weather, incapaz de confiar en nadie que no sea del espacio… VENGA YA Bellamy, no nos hagas esto.
Así pues tenemos a Lexa queriendo proteger a sus clanes y a los ‘skikru’ a toda costa, mientras uno de esos clanes, la Nación del Hielo, quiere acabar con Lexa para alzarse con el poder y así conseguir a Wanheda. Y a la vez, entre los ‘skikru’ empieza a resurgir un odio atroz hacia los ‘grounders’, tanto a los que quieren matarlos como a los que quieren protegerlos, creando así una guerra a tres bandas que únicamente favorece a la Nación del Hielo.
Precisamente la Nación del Hielo cuenta con una ayuda inesperada, y es que por desgracia Emerson (Toby Levins), el único de quienes vivían en Mount Weather que salió con vida de allí, ha decidido aliarse con ellos. Esto ya no es ayudar a Nia a ir a por Lexa, si no que Emerson habrá hecho algún tipo de trato en el que ayuda a la Nación del Hielo probablemente a cambio de venganza por lo que Clarke y los suyos hicieron en Mount Weather.
Tan solo llevamos tres capítulos y la guerra está a punto de estallar, con dos bandos que empiezan a verse con claridad donde unos tienen más ansia de sangre que otros y donde seguramente habrá muchas bajas. ¿Y vosotros de qué lado estáis? ¿Creéis que Pike con su radicalismo tiene razón? ¿O por el contrario Lexa, Clarke y Kane son quienes andan por el buen camino queriendo firmar la paz y luchar junto a los ‘grounders’ contra Nia? Y una pregunta importante que nos hacemos…entre toda esta situación bélica, ¿habrá algún momento en el que la historia de Jaha (Isaiah Washington) y la Ciudad de la Luz conecten con esto y tenga sentido o es solo una trama más que mantener en segundo plano? Ahora toca esperar hasta la semana que viene para un nuevo capítulo, y no dudamos de que este ‘hype’ que nos ha dejado esta semana seguirá creciendo con el paso de los días.
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