Las cosas se siguen complicando cada vez más en ‘The 100‘ y la guerra entre los grupos que viven en la Tierra sigue su curso más duramente que nunca. Si no has visto este episodio todavía ten cuidado porque te informo de que contiene ‘spoilers‘.
La guerra que está teniendo lugar entre ‘reapers‘, ‘grounders‘, la gente de Mount Weather y la gente del Arca avanza y se recrudece cada día que pasa aunque más que una guerra propiamente dicha se está empezando a parecer bastante a ‘Los Juegos del Hambre‘. Parece que las actividades que se llevan a cabo en Mount Weather tienen la culpa de más desastres de «la nueva civilización» de los que podíamos imaginar, incluso puede que de más que la propia radiación.
El nuevo descubrimiento hecho por las personas de Mount Weather abre a esa gente, que está condenada a vivir en un mundo subterráneo, las puertas a una nueva forma de vida gracias a la sangre de los 49 (dónde quedaría aquello de los 100), que ha probado ser bastante más eficaz que la de los ‘grounders‘. Pero que no se diga que allí son malos porque no se puede negar que los chicos se han prestado a formar parte del proceso voluntariamente, previa amenaza indirecta de acabar enjaulados como los demás terrícolas, pero voluntariamente al fin y al cabo. No llego a entender muy bien la forma de actuar de esos 49 que quedan allí, ya que parecen estar muy perdidos sin un líder que les diga qué hacer y solo esperando a que vayan a rescatarlos cuando creo que todos esos chicos han demostrado ser muy capaces de conseguir salir y defenderse por sí mismos porque de otro modo no hubieran aguantado hasta ahora en la superficie.
Pero las atrocidades realizadas por los que parecen ser los descendientes de los seres humanos actuales no se quedan ahí ya que la niebla radiactiva que ya conocimos en la primera temporada y que pensamos, al menos yo, que se debía al apocalipsis nuclear que se vivió en el planeta resulta ser también obra de ellos. Un arma de lo más rastrera y cruel para ganar una guerra sin ni siquiera mancharse directamente las manos. Los descubrimientos de este capítulo sobre las verdaderas actividades de Mount Weather siguen cuando vemos a Lincoln convertido en un ‘reaper‘, alimentándose de los compañeros del Arca caídos. Aunque todos estos datos empiezan a ser demasiados para procesar solo puedo llegar a la conclusión de que los experimentos por los que hicieron pasar a Lincoln (Ricky Whittle) y a los demás ‘grounders‘ apuntan a un método más para acabar con sus enemigos sin mancharse las manos, una vez más. Son, básicamente, los maestros de la guerra sucia.
Por si fuera poco los ‘grounders‘ se ponen duros y piden a la gente del Arca que se vaya en dos días o se prepare para lo peor. No es de extrañar que quieran tomar represalias después del brutal ataque de Finn (Thomas McDonell) hacia su gente pero lo que está claro es que las cosas empiezan a ponerse interesantes. Más respetables que las de Mount Weather parecen las tácticas de guerra de los ‘grounders’ e incluso también puede que más inteligentes, ya que la infiltración de la comandante para averiguar las verdaderas intenciones de sus enemigos es digna de admirar, creo que el personaje de la comandante me acabará cayendo bien, espero no equivocarme.
Con tantas batallas no parece haber demasiado lugar para el romance, por mucho que fastidie a ciertos sectores del fandom, pero sí podemos ver las reacciones de las Clarke (Eliza Taylor) y de Raven (Lindsey Morgan) , que ya camina como si la pierna se le hubiera curado milagrosamente, a lo sucedido con Finn. Dichas reacciones nos dejan claro que Clarke ya no le reconoce y sí, los partidarios de «bellarke» como yo no tenemos dudas de que esto va más allá de la locura transitoria del chaval sino que existe un acercamiento a Bellamy (Bob Morley) que no se puede negar. Esto es lo mejor que podría pasar, ya que Finn puede volver a centrarse en la chica que prueba quererle a pesar de todos los defectos que pueda tener y dejar a Clarke seguir con su vida.
En definitiva, ‘The 100‘ está mejor que nunca, con muchísimos frentes abiertos a la vez pero conectados unos con otros de manera que nos hace seguir enganchados e interesados en cada una de sus tramas, algo que no es fácil de conseguir sobre todo en series enfocadas a un público más adolescente, que suelen centrarse en determinados temas dejando otros de lado. Aquí el equilibrio entre todas las historias es total, con personajes muy carismáticos que en ningún momento nos hacen pensar que haya elementos «de relleno». ¿A vosotros qué os ha parecido el episodio? ¿Qué es lo que más os gusta de la serie? ¿Qué creéis que harán los ex habitantes del Arca ante la amenaza ‘grounder’? Comenta con nosotros pero antes te ofrecemos la promo del próximo capítulo.
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