‘Supernatural‘ despide su temporada número 12 con un capítulo doble que no deja a nadie indiferente y que nos hace llorar 40 litros de lágrimas. ¿Has visto ya la ‘season finale‘? Si no es así deja de leer porque esta entrada contiene ‘spoilers‘.
No tenemos ni idea de por qué CW ha decidido emitir juntos los dos últimos capítulos de la temporada pero la cosa funciona, quizás es que había tanta trama abierta por cerrar que la cosa necesitaba su tiempo. Por un lado tenemos a los Hombres de Letras Ingleses que por Dios que desaparezcan ya porque son muy pesados y nadie que se meta con Jody Mills se merece un espacio dentro de nuestro corazón ni respeto como personaje malvado. El caso que estos hombrecillos deciden cargarse a los cazadores americanos pero estos se unen y les mandan a freír espárragos, aunque dudamos mucho que sea para siempre.
Otro final llevado a cabo en el capítulo 22 es el lavado de cerebro de Mary (Samantha Smith) que es traída de vuelta a su cuerpo con la ayuda de Dean (Jensen Ackles) cosa que nos ha parecido demasiado fácil y que sea sin ninguna secuela resulta un poco extraño y hace que nos olvidemos de una trama que no ha estado mal pero a la que se le podría haber sacado un partido de al menos 5 capítulos más.
El caso es que nos metemos en el episodio 23 de lleno y llegamos a la trama que verdaderamente nos interesa y disfrutamos que es la trama Lucifer (Mark Pellegrino). Su hijo está a punto de nacer y él ha destronado a Crowley (Mark Sheppard) pero al final tras una serie de catastróficas desdichas acaba encerrado con Mary en el universo paralelo que crea su hijo que es una especie de Apocalipsis, un lugar donde los ángeles y demonios están en una batalla constante. Aquí está nuestro interés de cara a la nueva temporada, un hijo que aparenta ser adulto y que tiene poder para abrir brechas espacio-temporales… ¿Será este personaje bueno o malo? ¿Estará tentado por el mal? Lo que sí está claro es que un ser tan malvado como Lucifer no podría tener mucho tiempo sobre la misma tierra que Sam (Jared Padalecki) y Dean porque le llevaría dos minutos destruírla así que lo más inteligente es apartarlo a otra trama diferente para poder mantener a este personaje cómico, divertido y malvado del que tanto disfrutamos pero sin preocuparnos porque acabe con el mundo en el que vivimos.
Y llegamos a nuestro comento lágrimas y tirémonos de un puente con las muestres de Castiel (Misha Collins), Crowley (Mark Sheppard) y Rowena (Ruth Connell), nosotros personalmente hemos optado por no creernos ninguna de las dos primeras hasta que no se demuestre lo contrario en la próxima temporada. Estamos muy acostumbrados a las muertes de los hermanos Winchester pero esta vez se han llevado a personajes que no sabemos si volverán o no suponemos que se sacarán algo de la manga para deshacer, al menos, las muertes de Castiel y Crowley o al menos eso es lo que deseamos.
Por otro lado tenemos en el mundo del apocalipsis, un mundo en el que Sam y Dean nunca han nacido de nuevo a Bobby (Jim Beaver) aunque no sea exactamente al que nosotros conocimos pero ahí lo está con lo cual, ¿estarán Crowley y Castiel también en ese mundo y podremos recuperarlos pero de una forma diferente?
En general, esta no ha sido la temporada más interesante ni el fin de temporada más impactante de todos pero cumple su función de dejarnos con la curiosidad hasta otoño y ver lo que nos depara la temporada 13.
¿Qué os ha parecido el final? ¿Qué balance hacéis sobre esta temporada? ¿Ha sido la temporada 12 una de las más flojas de la serie o forma parte de vuestras favoritas? ¿Creéis que son definitivas las muertes de Castiel y Crowley? ¿Qué más poderes tendrá el hijo de Lucifer? ¿Se ayudarán Mary y Lucifer en ese mundo paralelo? ¿Desaparecerán los Hombres de Letras ingleses y nos dejarán a todos tranquilos?
Como siempre, os invitamos a comentar este capítulo con nosotros y os dejamos este vídeo de 27 minutos sobre la historia de amor entre Dean y Castiel para que lloremos todos un poco más.
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