Hemos oído hablar mil y una veces de Fort Rozz, la famosa fortaleza a lo Alcatraz donde los kriptonianos encerraban a sus criminales más peligrosos. Y este capítulo de ‘Supergirl‘ ha decidido traernos un algo diferente para contarnos la historia.

La mejor excusa del mundo para huir de los hombres pueden hacérnosla revelado en esta serie, vamos a interrogar a alguien en Fort Rozz, que casualmente está en una galaxia que no admite hombres jeje bye. Una pena que sea todo ficción y, sobre todo, tan claramente cutre. Porque, en efecto, los decorados y efectos especiales en esta serie no sé si son cada vez peores o es que ya han dejado siquiera de intentarlo. Al menos saben por donde nos gustan los líos que nos traen a un equipo de mujeres en el que, a pesar de que no tendrían por qué llevarse bien, juegan en equipo. Una mecánica que ya hemos visto en otras de las series de CW y DC, una fórmula de éxito si los personajes tienen personalidad. Ha funcionado con Live Wire (Brit Morgan) y con Psi (Yael Groblas), algo que no acaban de conseguir con Imra (Amy Jackson), que sí, es guapísima, pero tía un poco de historia, de experiencia personal… ¿quién eres?

Han querido utilizar este capítulo para mostrarnos a un nuevo destructor de mundos, otra mujer que consigue parar un coche y se revela como parte relevante de la historia. Ahora Kara (Melissa Benoist) ya sabe a lo que se enfrenta, al menos en parte, y estamos así «encabezados» al final de la temporada. No está siendo una buena temporada en cuanto a la trama principal, pero la realidad es que todas las ramificaciones secundarias de la línea principal interesan más y funcionan mejor que la verdaderamente importante. Nos interesa la propia Kara, Alex (Chyler Leigh), Lena (Katie McGrath)… y sus vidas. Sus vidas con poderes.

En este episodio hemos visto otro gran momento para Alex, que se queda como responsable de Ruby (Emma Tremblay) y le soluciona un problema de bullying de la manera más divertida. Y esperamos que sea eficaz, ojalá otros tantos niños tuvieran como opción algo así.

De todas maneras, no es el único drama que tiene Ruby, que la pobre tiene que lidiar ahora con su madre que no sabe ni dónde ha dejado la cabeza.

Nos preguntamos si esto de juntar a Supergirl con algunos de los villanos con quien ha luchado en el pasado será cosa de un momento o se convertirá en algo más habitual al ver que hay buena reacción del público… Por Tumblr ya hay gente shippeando a Imra con Psi, cómo les gusta un buen dramita. ¿Qué os ha parecido la intensísima conversación entre Kara y Mon-El (Chris Wood)? ¿Creéis que su relación ha terminado?