La serie más esperada del año en Freeform llega al ecuador de su temporada, con un ritmo muy irregular, muchas críticas detrás y, lo más importante: siendo cada día más y mamarracha. Si aún no has visto el último capítulo, no sigas leyendo, esta entrada podría contener spoilers.

La cosa va de familias. Cuando Maryse Lightwood (Nicola Correia-Damude), la madre de Alec (Matthew Daddario) e Izzy (Emeraude Tobia), llega al Instituto, para reclamarle a sus hijos y a Jace (Dominic Sherwood) su falta de comportamiento desde que rescataron a Clary (Katherine McNamara).

Por su parte, la pelirroja está empeñada en volver a su casa, y recuperar una caja que, de repente, consigue recordar, y que su madre siempre le intentaba ocultar.

Hay veces que podemos defender una serie con uñas y dientes, a pesar de sus malos actores y de sus mamarrachadas. Sin embargo, en su quinta semana en antena, ‘Shadowhunters’ nos da cada vez más razones para ponernos en su contra.

Ya no es que los actores sean malos, porque verdaderamente se salvan dos (Simon (Alberto Rosende) y Magnus (Harry Shum Jr.)), sino por lo confuso que resulta todo. Las tramas se entremezclan, y se pierde el hilo con demasiada facilidad… Hay cosas que parecen dar por hecho que el resto del mundo sabemos y, para los que sólo nos hemos leído algún  libro (habrá gente que no haya leído ninguno), nos resulta difícil engancharnos a la trama como nos gustaría.

 

Por supuesto el gran problema que tiene esta serie es su protagonista. En un principio, yo salvaba a Jace, pero conforme avanzan los capítulos… La falta de química entre ellos hasta me da igual, pero que no sepan ni tan siquiera actuar un poco… Lo de Clary es de feria, verdaderamente. Entre las caras de estreñida que pone, que de verdad parece que éste sea su primera vez como actriz, lo raro que se mueve (¿cuántas veces se dislocará la cabeza por capítulo?)… Es que no tengo ni un punto a favor de ella.

Jace, bueno, pues otro tanto de lo mismo. El papel de chulo le sale exagerado. Hay gente con actitud y gente que, simplemente, es plana. A él le ocurre lo segundo. Además, y concuerdo con Alec, está completamente obsesionado con Clary, y es que no soy capaz de creerme esa «relación»… ¿Pretenden que me crea que vaya a surgir algo entre ellos dos?

Los Lightwood, por lo menos, son personajes con los que te sientes identificado. Me gusta el papel que juega Alec, a pesar de estar amargado, y, por supuesto, todo ese dolor que siente al ver como su «parabatai» corre desesperado detrás de Clary… Izabelle me parece un personaje más complejo que esa imagen que da. El encuentro con su madre ha sido esclarecedor, y está claro que no la toman en serio por ser «la guapa».

En cuánto al tema licántropos… Me encanta que, como saben que si hacen una escena de pelea entre dos lobos, puede salir un churro, oculten a los animales tras cajas de madera… Bien. Ahora, ¿pretendéis hacernos creer que el triste de Luke (Isaiah Mustafa) es ahora el nuevo alfa? Pobre manada, lo que les espera…

¿A vosotros qué os ha parecido el capítulo? ¿Os ha gustado? ¿Seguís confiando en la serie? ¿Mejorará? ¿Deberían cargarse a los protagonistas? ¡Animaros a comentar vuestras impresiones con nosotros!

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