Quantico 1×19: Aliados sorpresa

Se acerca el final de ‘Quantico’ con una segunda temporada ya firmada y nos preguntamos qué hemos estado viendo y hacia dónde va toda esta historia. Capítulo a capítulo las cosas han ido teniendo más sentido pero al mismo tiempo, se han complicado más y más y ya no sabemos a donde queremos llegar.

Cuidado, esto es un recap del último capítulo emitido, contiene ‘spoilers‘.

Ver a Shelby (Johanna Braddy) en el coche hace dos capítulos nos sacudió el mundo de arriba para abajo. A pesar de que es un personaje adorable a quien no le pegaría nada ser parte de un grupo terrorista hubiera sido un gran ‘twist‘ del estilo de ‘Agents of S.H.I.E.L.D.‘ y Hydra. Aunque nos han intentado convencer de que tanto Caleb (Graham Rogers) como Shelby eran malos -y casi nos lo creemos- al final el capítulo ha vuelto a poner enfoque en los malos de verdad, esos que no tenemos N I I D E A de quiénes son.

Personalmente lo tengo claro, puede que ya hayáis leído mis teorías sobre la familia Haas y sobre la muerte de Natalie (Anabelle Acosta) o puede que no, para los que os encontráis en el segundo punto os cuento: la familia Haas es demasiado influyente y sus actores son demasiado conocidos como para que no tengan la mayor de las tramas detrás. La muerte de Natalie y la de Clayton Haas (Mark Pellegrino) han sido demasiado ignoradas y pasadas por alto -no hemos visto cadáveres ni a gente sufrir demasiado- como para hacerlo realmente creíble.

La muerte de Natalie ha sido completamente ignorada a lo largo de la temporada, a pesar de que es la única que pareció confiar en Alex (Priyanka Chopra) desde el principio y a pesar de todo.

Que ahora revuelvan en su muerte puede significar dos cosas: que descubran que no, que no ha ocurrido semejante cosa -sobretodo ahora que nos acercamos a final de temporada y las grandes revelaciones tienen lugar ahora– o que todos terminen enterándose de la muerte de Natalie como herramienta de la trama para unir a todos con Alex de nuevo.

Sé que lo repito en muchos recaps, pero tampoco me fío nada de Liam (Josh Hopkins) y cada vez menos de Ryan (Jake McLaughlin), cuya transformación en malo sería muy Anakin Skywalker y nos encantaría. Sobretodo porque se han pasado la temporada haciéndonos creer que Ryan Booth es perfecto y seamos honestos: nadie lo es.

Al final del capítulo hemos tenido un ‘plot twist‘ tan inevitable como espectacular. Will (Jay Armstrong Johnson), que tan rápido como vino se ha ido por un virus que parece formar parte de un arma química creada por él mismo para infundir el terror en un nuevo ataque.

Ya sabemos que las armas químicas son el máximo miedo de la población y de los gobernantes actualmente, sobretodo por el desconocimiento que hay acerca del tema. Y si las series reflejaran lo que pasa en realidad en la vida real es probable que ya haya habido muchos intentos casi exitosos de matarnos a todos con algún tipo de virus. Que la serie utilice este recurso es nuevo y sobretodo, renueva el interés después de dos bombas diferentes.

Además esto confirma que va a haber otro ataque más. No podemos esperar a recibir más información acerca de lo que ha pasado y lo que ha estado pasando en todo este tiempo de incertidumbre. Además nos preguntamos si se resolverán todas las dudas planteadas hasta ahora antes del final de la temporada o si se dejará alguna de estas tramas abiertas para la segunda edición de la serie el año que viene…

¿Qué os parece cómo ha ido evolucionando la serie? ¿Os ha gustado el capítulo? ¿Os da pena la muerte de Will? ¿Cómo encaja la secta con todo esto?

4 comments
Marina Ortiz
ADMINISTRATOR
PROFILE

Quizás te pueda interesar...

¡Comenta el capítulo con nosotros!