Hasta la familia más optimista que conocemos puede tener uno de esos días en los que nada parece salir como debería, y que ese extraño evento tenga lugar durante la ‘season finale’ puede ser la excusa perfecta para cerrar la temporada al más puro estilo ‘Modern Family’.
Phil (Ty Burrell) todavía no acepta que sus hijos seguirán haciéndose mayores durante el resto de sus días, sobre todo cuando se trata de su ya no tan pequeño bebé. Que no comprenda cómo es posible que Luke (Nolan Gould) cuele a una chica en su casa después de haberle visto organizar una fiesta delante de sus narices no es muy entendible, pero su reflexión posterior sobre no tener ni idea de por qué está tan afectado para terminar confesando que lo único que le aterra es ser testigo de la inevitabilidad de la madurez de sus hijos es el final más entrañable para una situación de este tipo. Sobre todo porque no solo ha sido la primera chica a la que Luke ha colado en su habitación (que nosotros sepamos), sino porque también ha sido la primera que le ha roto el corazón.
Su ‘partner in crime’ tampoco ha tenido el mejor día de su vida esta semana. Claire (Julie Bowen) sigue sufriendo en sus carnes lo difícil que es llevar una empresa cuando su intención es llevarse bien con todo el mundo, y parece que volver a tener a Jay (Ed O’Neill) rondando por ahí tampoco le está sirviendo de desahogo. Decidir que vas a despedir a alguien el mismo día en el que esa persona supera tu récord en la máquina de bailar es la peor de las coincidencias, pero hacerlo a pesar de lo mal que pinte el asunto es una de esas decisiones que nos recuerdan que, aunque parezca que siempre anda preocupada por lo que los demás puedan pensar de ella, Claire siempre es fiel a sí misma y nunca se deja amilanar por nadie.
¡Y Haley (Sarah Hyland) y Andy (Adam DeVine)! Estos dos sí que no han visto a su situación darse la vuelta para convertirse en algo con lo que sonreír después. Es un poco injusto que, ahora que hemos conseguido verlos juntos, hayamos visto tan poco de su relación y vayamos a ver todavía menos. Sabemos que se quieren mucho y sabemos que lo mejor para Andy es irse para trabajar en lo que quiere, pero, ¿no habría sido mucho mejor haber catado un poco de esa relación? A nosotros nos da a sensación de que nos la hemos perdido desde el principio hasta el final.
No ha sido el mejor capítulo de la temporada, pero Joe (Jeremy Maguire) recitando ‘Casablanca’ ha sido lo más adorable que habéis visto en mucho tiempo. Y lo sabéis. ¿Y la permanente de Lily (Aubrey Anderson-Emmons)? Una maravilla.
Aunque no se han abierto incógnitas para la siguiente temporada, sí que se han dejado las bases cimentadas para lo que puede ser un 8×01 muy interesante. Cada uno desconectando de sus vidas a su manera, ¿con qué se encontrarán cuando vuelvan de sus respectivas escapadas? Va a ser maravilloso ser testigos de lo que vayan a encontrarse, porque mientras unos contaban con que otro se ocupase de sus plantas, ese otro esperaba que el primero le tomase el relevo en el trabajo. Y recordad, si algo puede salir mal, saldrá peor.
¿Qué catástrofes predecís en el retorno al hogar de los personajes? ¿Os da también la sensación de que no hemos podido disfrutar en absoluto de Haley y Andy? ¿No os comeríais a Joe cada vez que habla?
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