Esta semana en ‘Modern Family’ nos recuerdan que ocultar ciertos datos a tus más allegados puede llegar incluso a ser necesario y que, si te pillan, llevar la situación con elegancia no es imposible.
Hasta ahora, Claire (Julie Bowen) no parecía encontrar la manera de compaginar su recién estrenado puesto de trabajo con la vida a la que se había acostumbrado, completamente dedicada a su familia. Claire se ha exigido siempre tanto que el simple hecho de reconocerse a sí misma que su problema tenía una solución tan fácil como la de pedir ayuda se lo ha tomado como algo de lo que avergonzarse. Parece mentira que con el maravilloso y comprensivo marido que tiene sienta que admitir que no puede llegar a todo es sinónimo de catástrofe. No necesitas contratar un asistente, Claire, Phil (Ty Burrell) tiene tantas ganas de quitarte pesos de encima como tú el deber de dejar de pensar que todo lo que pasa es tu responsabilidad.
Otros que también son fieles seguidores de las mentiras piadosas son Gloria (Sofia Vergara) y Jay (Ed O’Neill). Ella, que deja a Joe durmiendo en el coche sabiendo la poca gracia que le hace eso a Jay. Y él, buscando todas las maneras posibles de que sea Stella la que devore ese plato colombiano que a Gloria tanto le gusta preparar y que él no tiene el valor de decirle que odia. No son mentiras que puedan compararse: abandonar a un hijo en el coche puede acabar mucho peor que dejando que tu perro se coma las sobras, pero esto es ‘Modern Family’ y aquí no se juzga a nadie, así que mejor quedémonos con el maravilloso momento en el que las mentiras han quedado al descubierto y todos han hecho la vista gorda mientras huían a arreglar sus propios desastres.
Ese ha sido precisamente el único momento en el que Manny (Rico Rodriguez) y Luke (Nolan Gould) han aportado algo al capítulo, porque su excursión para arreglar la pantalla de ordenador congelada en una web porno no nos ha interesado demasiado. Los jóvenes – a excepción de Lily (Aubrey Anderson-Emmons), que sale poco en pantalla pero cuando sale sabe hacerse notar – están muy desaprovechados en esta serie, pero es entendible cuando tienen que compartir minutos con personajes como Phil Dunphy o Gloria Delgado. ¿Qué preferimos? ¿Cinco minutos de Luke y dos de Cameron (Eric Stonestreet) o viceversa? Porque yo me quedo con Cameron.
Por su parte, y aunque tampoco han tenido mucha relevancia esta semana, Cameron y Mitchell (Jesse Tyler Ferguson) se han ido de boda, donde han descubierto que su querida Lily ha estado rechazando todas las invitaciones que llegaban porque su reputación y la vergüenza que le produce la técnica de baile de sus padres la han obligado a tomar esas drásticas medidas. Y la verdad es que no es para menos:
¿Qué os ha parecido el capítulo? ¿Habéis echado de menos a Andy (Adam DeVine) después de lo que pasó la semana pasada con Haley (Sarah Hyland)? ¡Comentemos!
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