Esta semana ‘Modern Family‘ nos ha regalado un capítulo de los de la vieja escuela que además contaba con mensajes sociales de lo más interesantes sin dejar de hacernos reír como de costumbre. Comentamos el episodio a continuación.
Conforme van pasando los años la serie va adquiriendo diferentes tonos, ya que parece evolucionar al igual que lo haría una familia. Así pues unos capítulos pueden tratar sobre el amor adolescente mientras que otros siguen teniendo los tintes de los primeros capítulos en los que se nos mostraban, principalmente, las locuras que le ocurrían a la familia.
En esta ocasión dejamos un poco de lado a los hijos y sus problemas para centrarnos en los de los adultos, en tres cómodos «fascículos» con sus tres hilarantes situaciones:
En primer lugar tenemos el ‘Airbnb‘ de Mitch (Jesse Tyler Ferguson) y Cam (Eric Stonestreet) que sigue dando juego para tramas que no terminan de cuajar tanto como probablemente los guionistas pensaron. Sin embargo es cierto que esta trama en particular ha caído en la familia Pritchett-Tucker como anillo al dedo porque no hay nada más creíble que un Cameron cotilleando a sus inquilinos y montándose historias macabras en la cabeza.
Esta historia nos enseña que no deberíamos dejarnos llevar por las primera impresiones porque cada cual tiene su propia «normalidad» y un matrimonio junto con un chico joven que tira cajas de lejía no tiene por qué ser una banda criminal. Lo cierto es que finalmente se demuestra que Mitch puede ser tan cotilla como su marido y, además, el doble de torpe. Desde luego una vez más ha sido Lily (Aubrey Anderson-Emmons) quien al final nos ha hecho soltar más de una sonrisa y es que una niña criada por estos dos personajes no podía resultar más que en una persona tan adorablemente descarada como ella.
Por otra parte mientras Jay (Ed O’Neill) disfruta de su jubilación acompaña a Gloria (Sofia Vergara) a comprobar cómo va la venta de su salsa en el supermercado pero lo que su marido no sabía es que la principal herramienta de marketing de este producto es una réplica de cartón de Gloria a tamaño real que además mueve el brazo lanzando besos, ¿solo a mí me ha parecido super extraño? Los supermercados de Estados Unidos deben ser más que curiosos… De cualquier manera, el hombre super celoso que hay en Jay vuelve a la carga y acaba por robar la figura de Gloria al más puro estilo «es mía y no la quiero compartir». Obviamente no es muy agradable ver cómo muchos hombres aún más cavernícolas se dedicaban a tratar mal a la figura, e incluso los chicos del instituto de Manny (Rico Rodríguez) llegaran a decirle comentarios propios de los niñatos más horribles de la escuela.
Parecía ser que el hábito de representar a Gloria como una mujer que no se da cuenta de cuando los demás le tratan mal por su imponente aspecto había quedado atrás pero nada más lejos de la realidad. El argumento «en realidad te estoy haciendo un favor porque no sabes lo babosos que son los hombres» sigue ahí. Lo que nunca nos cansamos de ver es esa parte mafiosa que a veces muestra Gloria y que está dispuesta a acabar con la adorable ancianita que era su ídola de las salsas para marcar su territorio.
Por último la más interesantes de las tramas de este capítulo ha sido la del matrimonio Pritchett-Dunphy en la que han dejado en evidencia, una vez más, a la familia tradicional mediante el sencillo recurso de darle la vuelta a la tortilla. En esta ocasión Phil (Ty Burrell) se ha dado cuenta de cómo es ser la pareja de una persona volcada en sus negocios y que te hace regalos caros para compensar su ausencia y desinterés. Lo vemos en muchas series y películas pero normalmente del lado contrario y como estamos acostumbrados no nos parece nada extraño que la mujer se quede en casa pendiente de las necesidades del hombre y este salga a trabajar en «asuntos más importantes».
A pesar de que ‘Modern Family‘ últimamente tiende a ser repetitiva y muchos podrían decir que ha perdido parte de su gracia original sigue habiendo veces que van más allá de buscar la risa simple para crear una crítica social. En este caso, finalmente, descubrimos que Claire (Julie Bowen) no actúa así por voluntad propia sino porque, precisamente, es el comportamiento que ha visto en su padre durante toda su vida. Alegra mucho ver cómo al final Phil y Claire resultan ser el matrimonio al que todos adoramos y que se basa en el respeto y el apoyo mutuo. Por cierto, ¿cuántas horas habrá tenido que pasar Ty Burrell practicando con el ‘hoverboard‘ para manejarlo con tantísima maestría?
Ahora es vuestro turno de comentar este episodio de la serie de ABC. ¿Echáis de menos las historias de los chicos jóvenes cuando no aparecen? ¿Cómo les irá a Andy (Adam DeVine) y Haley (Sarah Hyland)? ¿Dónde se ha metido Joe (Pierce Wallace) durante todo el capítulo? ¿Cuál es la trama que más os ha gustado? Esperamos vuestras opiniones en la sección de comentarios.
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