‘Modern Family‘ vuelve a dejar de lado las tramas de los más jóvenes de la serie para centrarse en cómo vive cada una de las parejas adultas su día a día. La temporada no termina de resultar tan fresca y graciosa como las primeras pero, sin duda, este capítulo ha tenido bastante humor negro para escandalizar al personal, ¿lo comentamos?
Esta semana en ‘Modern Family‘ vivimos con una de las parejas cómo es recibir atención de otras personas cuando se llega a cierta edad llevando muchos años casados. Además Jay (Ed O’Neill) se encuentra con la peor pesadilla de los que creamos contenido en Internet (aparte de la falta de wifi) y Mitch (Jesse Tyler Ferguson) y Cam (Eric Stonestreet) intentan alejar a Lily (Aubrey Anderson-Emmons) de todos los miedos que le van surgiendo.
Un matrimonio como el de Phil (Ty Burrell) y Claire (Julie Bowen) puede parecer perfecto pero, después de tantos años casados y aunque ambos estén felices con su relación, es inevitable sentirse halagado cuando atraes la atención de alguien que a ti también te parece interesante porque te saca de la rutina y, desde luego, te hace sentir mejor contigo mismo, además de rejuvenecerte varios años. Ha sido estupendo ver en este capítulo cómo eso le puede pasar a cualquier persona y cómo puede no pasar de ser un halago que ninguno de los dos han considerado llevar más allá porque aprecian lo que tienen. También ha sucedido algo que ya era hora que pasara y es que a alguien le llamara más la atención Claire que Gloria (Sofia Vergara). Está claro que Gloria es de lo más exuberante y con su forma de hablar suele dejar a todos babeando a su paso pero que siempre fuera Claire la que se quedara en segundo plano sintiéndose menos que su madrastra era una incoherencia total, ¿no os parece?Por otro lado, mientras Gloria buscaba atención por parte del profesor de yoga Jay la buscaba por parte de todo Internet con un programa en directo para todo aquel que lo quisiera ver. Y, obviamente, entre la gente que se sienta a escuchar sus opiniones se encuentran los típicos trolls de Internet, esa gente sin mucho que hacer en la vida y que por algún motivo encuentran placer en hablar mal a otras personas en Internet. Al final, tras involucrar a los compañeros de Alex (Ariel Winter) en la búsqueda de uno de esos trolls, resulta que, como nos ha enseñado ‘Catfish‘ las personas que más molestan son personas a las que se conoce personalmente. Esta trama tampoco ha resultado tan graciosa como supuestamente pensaron los guionistas al imaginarse una historia de Jay luchando contra el mundo de Internet pero recupera a su némesis que ahora se aburre sin nadie a quien hacerle la vida imposible en el negocio de los armarios.
Por último, los Pritchett-Tucker se preocupan por la situación en la que se encuentra Lily en la que casi todo le empieza a dar miedo y enseñarle a montar en bici se convierte en la misión de la semana para ellos. Al final aprendemos que no hay mejor método para animarse a hacer lo que nos da miedo que la competitividad o una voluntad de acero. Lo mejor de todo el capítulo, sin duda, han sido todos los ‘gags‘ que han salido de determinadas situaciones no demasiado graciosas. Realmente ‘Modern Family‘ sigue siendo una serie de lo más entretenida de ver pero que se aleja bastante de sus primeros episodios en los que el humor derivaba mayormente de los tipos de familias que se habían juntado. Afortunadamente estos modelos de familias modernas están ya algo más aceptados en nuestra sociedad y las bromas al respecto dejan de tener tanto sentido como en aquella época pero se agradece seguir viendo cómo evolucionan poco a poco. ¿Qué os ha parecido a vosotros el episodio? ¿Alex no había vuelto a vivir en la casa familiar? ¿Dónde está Haley (Sarah Hyland)? ¿Y Joe? ¿Por qué la gente aparece y desaparece de estas casas como si tal cosa? ¿Qué es lo que más gracia os ha hecho del capítulo? Esperamos vuestras opiniones en la sección de comentarios.