AnDespués del «truco más viejo» que nos revelaron la semana pasada, intentamos volver a esta serie telenovelesca sin pensar demasiado en lo que podemos sufrir en el futuro. Jane (Gina Rodríguez) hace grandes avances en su relación y tenemos novedades en el frente del Marbella también.

Empecemos por el Marbella. Rafael (Justin Baldoni) ha caído en la tentación y está saliendo con Katherine Cortes (Alex Meneses), quien comprará el hotel y le promete que va a contratarlo como jefe y luego le va a dar todas las facilidades para que lo recupere. Jane y Petra (Yael Grobglas) la odian, por cierto.

La mujer está decidida a formar parte de la vida de Rafael y le dice a éste que quiere conocer a sus hijos. Rafael hace quedar mal a Jane y le echa la culpa de no poder presentarle a los críos y Katherine se enfrenta a nuestra protagonista, advirtiéndola (amenazándola, más bien) de que será su nueva jefa. Jane y Rafael discuten y ella le pide que frene, pero él hace caso omiso y le presenta a Mateo y a las gemelas a su nueva novia.

Anezka y la madre de otro par de gemelas, Magda (Priscilla Barnes), descubren el plan de Rafael y amenazan (más amenazas) a Petra con contárselo todo a Luisa (Yara Martínez) si no reciben algo a cambio. Petra cede y ambas aceptan irse a República Checa para no volver jamás.

Por su parte, Jane tiene doble conflicto a la vista: su editorial propone una portada horrible para su libro y está hilando todo para que Mateo conozca a Adam (Tyler Posey) y lo adore. El plan funciona, aunque Rafael no está del todo seguro de sentir simpatía por Adam, sospecha que se incrementa cuando ve mensajes de una chica en el teléfono del nuevo novio de Jane. Se lo dice a la madre de su hijo y ésta se lo pregunta directamente a Adam, quien confiesa que estaba hablando con otra chica porque estaba trabajando con ella para diseñar una nueva portada del libro de Jane. Ohhh.

Rogelio (Jaime Camil) ha recibido a su nueva hija y la relación entre Darci (Justina Machado) y Fabian (Francisco San Martín) sigue viento en popa.

Los cliffhangers con los que nos quedamos en este capítulo son el ataque de pánico de Adam en la última escena (oh-oh…) y un señor que visita a Luisa con una clara propuesta: incendiar el hotel para conseguir el dinero del seguro. Y ahora, ¿qué? ¿Será así como muera uno de los seis personajes que nos decían?