¡Por fin! Ha vuelto Jane the Virgin, y podemos volver a nuestro mundo telenovelesco y rinconcito feliz para disfrutar con las aventuras de Jane (Gina Rodríguez) y sus locuras, el ego de Rogelio (Jaime Camil) y la ajetreada vida de Rafael (Justin Baldoni) y su peculiar familia.

Arrancamos. Jane acaba de recibir la carta que Michael (Brett Dier) le había escrito hace años, y aparca la conversación con Rafael (esa en la que iba a confesar que seguía sintiendo cosas por él). Por si no tenía los sentimientos lo suficientemente a flor de piel, en ese momento aparece el que fue su primer amor: Adam (holaaa Tyler Posey).

Sí, Adam. Y no viene solo, trae consigo a una maravillosa voz femenina que explica la vida de Adam y se enzarza en una batalla dialéctica con nuestro igual de maravilloso narrador. Además, las anotaciones en referencia a Adam se hacen en estilo de cómic y no de telenovela, ya que el nuevo interés amoroso de Jane es novelista gráfico.

En este episodio descubrimos que Jane estuvo a punto de casarse con este muchacho años atrás, pero la abuela (Ivonne Coll) y Xiomara (Andrea Navedo) no estaban nada de acuerdo con la decisión de los polluelos y convencen al joven Adam para que recule. Nuestra Jane acaba con el corazón roto, compuesta y sin novio, aunque Adam le dice que espera que se encuentren de nuevo en el futuro.

Las esperanzas de Adam se cumplen y se va con Jane a la playa para ponerse al día. La velada es interrumpida por un cambiadísimo Mateo (Joseph Sanders), que cree que su mamá se ahoga y corre a salvarla. Los tortolitos recuperarán la cita y a pesar de los esfuerzos de Adam y sus conocimientos sobre astrología, Jane no puede centrarse… se acuerda de Rafael a cada momento y se sincera con su primer amor, lo que acaba con la cita.

Rafael, por su parte, se está quedando en casa de Jane. Cuando ésta le escribe para decirle que la cita no ha ido muy bien, él le dice que se alegra, y que la espera en casa para hablar. ¿El problema? Jane interpreta esta «alegría» de Rafael como algo íntimo y una señal para mover ficha. Llega a casa, Rafael está en la ducha y ella empieza a sacarse la ropa… hasta que Rafael le dice que de lo que quiere hablar es del cole de Mateo.

Jane lucha contra su cremallera atascada y ambos empiezan a discutir acaloradamente. Rafael le reprocha que por su culpa se acabó lo suyo con Petra (Yael Grobglas), Jane le echa en cara que él le mandó señales y que tiene que tener en cuenta lo que ella opina para tomar decisiones sobre Mateo y cómo gestionan el dinero. Portazo de uno y de otro y morros de aquí a la luna. Parece que Adam merecerá una segunda (¿tercera?) oportunidad al final…

Petra también tiene lo suyo, y no es poca cosa. Resulta que su malvada hermana gemela, Anezka, ha intentado matarla. Ambas cayeron al mar y Petra pudo ser rescatada, pero ni rastro de la gemela. Luisa (Yara Martínez), al verla, piensa que es Anezka haciéndose pasar por Petra y se deja en evidencia delante de la rubia. Petra le sigue la corriente y le comenta a Rafael que la hermanísima ha planeado matarla con la gemelísima para hacerse con el hotel. Juntos deciden controlar la situación, pero pierden este control cuando, sorpresa, ¡Anezka aparece de nuevo!

Mientras, Xiomara calma y anima a Rogelio para que haga las paces con la madre de su hija, quien se pone de parto en este mismo episodio. ¿Qué os ha parecido? ¿Teníais ganas de que volviese Jane the Virgin?