Todos los que estamos aquí tenemos una pasión en común: las series. Todos nos pasamos horas de nuestra ajetreada semana viendo nuestras ficciones favoritas, siguiendo estrenos interesantes, descubriendo clásicos que no vimos en su día…Compartimos ese gusto por trasnochar al no poder dejar de ver algo hasta que no terminemos la temporada…o el primer capítulo de la siguiente para poder respirar. Y, por supuesto, todos tuvimos una primera vez.

Me refiero a esa serie que nos enganchó como ninguna, que nos atrapó de una manera que no nos levantamos del sofá en semanas y no podíamos hablar de otra cosa. Nos hizo nacer como seriéfilos y por ello siempre tendrá un hueco especial en nuestro corazón. Hoy vengo a contaros la mía.

No siempre me gustaron las series. De pequeña me acostumbré a ver series que no entendía. Me gustaba ver ‘7 vidas’, obviamente sin encontrar ninguna gracia a la serie, y lo mismo con ‘Aquí no hay quien viva’. Fue un poco más mayor, con unos 11 años, cuando mi padre me descubrió el maravilloso mundo de las series de animación.

Me vi las 4 -y únicas de aquella- temporadas de ‘Futurama’ del tirón. Fue algo asombroso. Los viernes eran mi día favorito de la semana porque llegaba agotada a casa de clase y de hacer deporte y me metía calentita a la cama a meterme en el cuerpo un buen maratón de una serie que me apasionaba. Me gustaba tanto que me vi tres veces seguidas el piloto cuando terminé la serie, sin cansarme o resultarme pesado ni una sola vez. Después vino ‘Family Guy’, y muchas más series de dibujos que siguen vigentes a día de hoy más las nuevas que fueron llegando.

Pero no, ahí no me sentía seriéfila. Solo había encontrado un par de series que me hacían sentir agusto, que me hacían reír y que me hacían disfrutar.

La llegada de la TDT marcó un antes y un después en la televisión para mí solo con la llegada del canal Neox. Como sabréis, ahí -sobretodo al principio- echan todas las series de animación de Matt Groening y Seth Macfarlane, por lo que era el canal que siempre SIEMRE veía. Sin embargo,  otras veces echaban series con actores, cosa que yo detestaba porque me quitaba capítulos de mis preciadas series.

En una de mis tardes vacías sin gran cosa que hacer o sin grandes ganas dejé el canal puesto y empezaron a echar una serie llamada ‘Cómo conocí a vuestra madre’. Inmediatamente me molestó, no solo no iba a ver todavía ‘Futurama’ sino que encima echaban una serie «de viejos». Así que hice zapping con esperanza de encontrar algo más juvenil, pero mi búsqueda de algo divertido fracasó y el destino me llevó a Neox.

De verdad, me sorprendió muchísimo que, con ese título, la protagonizara gente joven, así que, no sé muy bien por qué, le di una oportunidad. Ahí comenzó algo imparable. Y bendito momento…

Las emisiones de Neox no conseguían saciar mis ganas de esta serie, ver capítulos sin saber muy bien si iba a poder ver lo que pasaría a continuación no me dejaba vivir. Es decir, como sabéis, en este canal tienen la costumbre de comprar un par de temporadas y emitirlas en bucle. Y eso pasó.

Llegó la boda de Marshall (Jason Segel) y Lily (Alyson Hannigan) y después, vuelta al piloto. ¿Qué hice? Coger el ordenador y buscar el siguiente episodio por primera vez en mi vida. Busqué y busqué hasta dar con él y seguí viéndome la serie en tiempo récord de lo que me estaba gustando, saboreando este nuevo vicio que acababa de descubrir y que me tendría día y noche en internet.

Claro que no todo iba a ser bonito, y al empezar la siguiente temporada ¡bam! ESTABA SIN DOBLAR. Por aquel entonces jamás había visto una serie en inglés subtitulado y, desde luego, no tenía intención de hacerlo. Así que dudé. ¿Esperar o ver AHORA qué está pasando en esta serie? La duda duró muy poco y empecé mi primer capítulo VOSE…

Y me gustó. Al poco ya llevaba la serie «al día» sin saber muy bien qué suponía esto ni cuando echaban los capítulos ni cómo verlos aquí. Pero Google existe por cosas como está y con mis nuevos conocimientos sobre series sin doblar una bombilla se alumbró en mi cabeza: «¿y si hago lo mismo con otras series que me gustaron en su momento pero su emisión era un caos y perdí el hilo?»

Pronto mi calendario estaba repleto de series. Pronto se unieron a ‘Cómo Conocí a Vuestra Madre’ ‘The Big Bang Theory’, ‘Scrubs’ y muchas otras. Algunas siguen en emisión. Otras terminaron hace años. Otras ya habían terminado cuando yo las descubrí. Pero todas me hicieron parte de este mundillo de ‘seriéfilos’ en el que terminé metida hasta el cuello sin darme cuenta.

‘Cómo Conocí a Vuestra Madre’ fue mi primera vez seriéfila porque fue la primera serie que me llevó a la locura del seguimiento de series al ritmo USA, a ver las cosas en su idioma original e incluso a no poder esperar a los subtítulos y verla en streaming a las 2 A.M. en una ‘season finale’. 

¿Recordáis vosotros cuál fue vuestra primera experiencia como seriéfilos? ¿Cuál es la serie que os viene a la cabeza con esa palabra? ¡Contádmelo en los comentarios!

 

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