Música, peleas, sangre, amenazas, música, problemas, amor… La mezcla que cada semana nos regala ‘Empire’ no podía faltar a su cita de los jueves haciéndonos sufrir un poquito más por todos y cada uno de los protagonista de esta serie a la que tanto amamos.

Lo cierto es que a pesar de los grandes momentos musicales que nos regala ‘Empire’, nos sobran dedos a la hora de contar cuántas de las cosas que están sucediendo actualmente pintan bien para la familia Lyon. André (Trai Byers) es en gran parte el protagonista de este capítulo, conectando desde el primer segundo con una Nessa (Sierra Aylina McClain) que poco a poco va alejándose cada vez más de Shine (Xzibit) y acercándose a Empire. El intento por parte de Lucious (Terrence Howard) y su hijo para conseguir que la joven cantante firme con ellos empieza bien pero termina de la peor manera posible, con Shine armándose hasta las cejas para vengarse de ambos. La firma está hecha y Nessa tiene su contrato con Empire pero, ¿a qué precio? ¿La venganza irá en serio y tendremos que ver a otro Lyon en peligro inminente de muerte como ya estuvo Jamal (Jussie Smollett)?

Y entre todo esto no olvidemos los problemas de André a la hora de olvidar a Rhonda (Kaitlin Doubleday), hasta el punto de ¿sentirla? cuando está con Nessa. ¿Será capaz de decírselo a alguien y buscar ayuda para solucionarlo? ¿O seguiremos viendo a Rhonda incluso estando muerta? 

Precisamente Jamal es otro que nos preocupa muchísimo tras los últimos acontecimientos vividos. Freda (Bre-z) está libre tal y cómo él quería, pero señalada para siempre por esas alegaciones de problemas mentales que realmente no tiene. Lucious de nuevo se sale con la suya negando veracidad a cualquier testimonio que ella pueda hacer en el futuro por el asesinato de su padre. Todo esto, unido a su síndrome post-traumático, forman una mezcla explosiva en Jamal, quien ni hace terapia ni deja de mentir sobre su verdadero estado, llegando al punto de no poder dejar de consumir sus pastillas y, para colmo, mezclarlas con alcohol. Quizás le ayuden a ser capaz de volver a subir a un escenario, pero de nuevo volvemos a preguntarnos cuales serán las consecuencias de todo esto.

Y mientras su familia no deja de girar en una noria de autodestrucción y problemas, Cookie (Taraji P. Henson) intenta ver algo de luz con Angelo (Taye Diggs). Además de dar las gracias por los momentos tan maravillosos que nos ha regalado en la ópera, no estaría nada mal que Cookie tenga algo sin tanta maldad en su entorno, porque falta le hace. Angelo se esfuerza en conseguir entrar en el mundo de Cookie, tan diferente al suyo, y además no se amedrenta ante las amenazas de Lucious. ¿Veremos por fin al patriarca Lyon morder el polvo o seguirá usando todo su poder para hacer que esta relación fracase?

Pase lo que pase por favor, que Cookie siga dándonos momentos tan maravillosos como los de este capítulo y no la hagan sufrir mucho. ¿Comentáis con nosotros el capítulo? ¿Qué os ha parecido?

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