La serie revelación de TVE en 2015 fue, sin duda, la creada por Javier y Pablo Olivares. ‘El Ministerio del Tiempo’ llegaba a la parrilla de televisión española como un soplo de aire fresco, una serie que, ante todo, buscaba cambiar la ficción en España. Y, a pesar de no cosechar las audiencias esperadas, la popularidad en redes sociales, hizo que TVE renovase por una segunda temporada a este fenómeno de serie. Hoy comentamos su vuelta, eso sí, con spoilers.
Valencia, año 1079. El Cid Campeador libra una de sus batallas, bajo la atenta mirada de dos extraños quienes, con una Súper 8, se dedican a capturar en video las hazañas del mítico héroe. Sin embargo, un inocente error desencadena en desgracia: el Cid muere veinte años antes de lo previsto.
El Ministerio del Tiempo tiene constancia de que algo extraño ha ocurrido con el Cid, cuando encuentran falsos restos suyos en Valencia. Así, Amelia (Aura Garrido) y Alonso (Nacho Fresneda), son enviados al siglo XI a averiguar qué ha pasado con Rodrigo Díaz de Vivar. Sin embargo, en esta ocasión, a Julián (Rodolfo Sancho) no se le permite acudir con sus compañeros a la misión…
¿Y lo contentos que estamos de que una de las mejores series españolas de la actualidad haya vuelto? ¡Por fin! Parece que haya pasado una eternidad desde que finalizó la primera temporada, y todos los seguidores de el Ministerio esperábamos con impaciencia alguna noticia sobre su incierto futuro. Finalmente, TVE nos dio el mejor regalo del año: una segunda temporada para ‘El Ministerio del Tiempo’.
Y, está claro, que el nivel iba a subir. En primer lugar, esta segunda temporada contará con 13 capítulos, a diferencia de la primera, que apenas fueron 8. En segundo lugar, la realización (que ya era buena) parece haber alcanzado un nivel diferente, mucho más meticuloso y detallado. Y, además, un reparto de actores excelentes.
En esta ocasión, el personaje histórico que protagoniza la misión de los «ministéricos» es el mítico héroe español, Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid. Cuando en el Ministerio descubren que han aparecido unos restos que, supuestamente, pertenecen al Cid, sospechan que algo ha podido alterar la Historia. Así, Amelia y Alonso, acompañados de Ambrosio Spínola (Ramón Langa), un general de origen genovés, viajan a 1079, para encontrarse cara a cara con el Cid (Sergio Peris-Mencheta). Pero su sorpresa al llegar allí no será la que esperan Alonso y Spínola quienes, cegados por la ilusión de conocer a su ídolo, no se dan cuenta de que, en realidad, es un impostor.
Y es que resulta ser que el falso Cid, no es otro que Rogelio Buendía, un funcionario del Ministerio del Tiempo, del año 1960. Enviado al siglo XI con la misión de documentar las hazañas del héroe, comete el error de distraerlo en una de sus batallas, lo que hace que el Cid resulte herido, y fallezca en el acto, y veinte años antes de lo que marca la Historia. ¿Y a qué venía lo de documentar al Cid? El actor Charlton Heston acudió a Don Ramón Menéndez Pidal (Luis G. Gámez), experto en la vida y obra del Cid, para conocer más sobre el personaje que iba a interpretar en el cine. Y ante la ignorancia del americano, Menéndez Pidal encargó al Ministerio del Tiempo un documental sobre el Cid Campeador.
Sin embargo, tras la inesperada muerte del verdadero Cid, a Rogelio Buendía se le encarga la misión de sustituir al héroe hasta el día en que, finalmente, fallezca. Es entonces, cuando Amelia, mujer estudiada y cultivada, se da cuenta de que todo lo que el aparente Cid cuenta coincide, sí, pero con las obras escritas sobre él. Finalmente, apenas un mes antes de que se cumpla la fecha del fallecimiento del Cid, Rogelio es herido y, desafortunadamente, fallece. No esperaba que desapareciese tan pronto el personaje de Peris-Mencheta… ¿es posible que en una de las misiones se lo encuentren y consigan salvarle de tan amargo destino? Ojalá que sí.
Mientras tanto, en el Ministerio del Tiempo, Julián ha sido puesto a cargo de la enfermería. Castigado por intentar salvar a su mujer de la muerte, el enfermero sigue empeñado en intentarlo otra vez. Sin embargo, Salvador (Jaime Blanch) se asegura de que Julián no tenga ningún posible acceso a ninguna puerta temporal…
¿Qué supondrá la marcha de Julián para la serie? Sabíamos que, debido a que Rodolfo Sancho protagonizó ‘Mar de Plástico’, no le sería posible compaginar ambos rodajes y, aunque su personaje no vaya a desparecer, parece que sus apariciones se reducirán a inicio y final de temporada. Así, nos deja inconcluso su ¿futuro? con Amelia… Aunque ella, por su parte, no tiene falta de pretendientes, y es que Alonso parece también predipuesto a pretender a la joven… Ahora bien, ¿importa de verdad esto? Amelia y Alonso son, independientemente, dos personajes únicos y singulaes, a diferencia de Julián, personaje plano, aburrido y con el que resulta muy difícil empatizar. En el próximo capítulo, además, llega al Ministerio el personaje que interpretará Hugo Silva, que, parece, sustituirá a Julián en las misiones… Aunque bien se podía quedar Spínola, una de las incorporaciones más divertidas.
La vuelta de ‘El Ministerio del Tiempo’ ha superado con creces nuestras expectativas. No ha perdido su esencia máxima, esos viajes en el tiempo cuya misión es que la Historia no sea alterada, intercalada con toques de humor desternillantes e ingeniosos. El cameo de David Sainz, creador de la exitosa webserie ‘Malviviendo’, recreando la frase de la ficción que le dio la fama; referencias a la serie dentro de la serie; o, mismamente, cagarse en «ese cabrón de Olivares».
Un regreso de diez para una serie de diez. ¿A vosotros qué os ha parecido el capítulo? ¿Os ha gustado? ¿Os esperabáis este regreso? ¿A dónde habrá ido Julián? ¿Volveremos a ver a Rogelio Buendía? ¡Animaros a comentar vuestras impresiones con nosotros!
