Si la semana pasada ‘Crazy Ex-Girlfriend‘ trataba sobre la honestidad con uno mismo esta semana toca un punto clave que empieza en el título de la serie y deberían haber tratado antes. De cualquier manera este «I’m back at camp with Josh!» nos ha vuelto a dar lecciones de lo más necesarias.

Probablemente cuando se anunció que ‘The CW‘ daba luz verde a una comedia llamada ‘Crazy Ex-Girlfriend‘ muchos pensáramos que trataría de hacer bromas fáciles con temas tan manidos como los tópicos sobre mujeres y la verdad es que no podíamos estar más equivocados. Desde que empezó la serie hemos podido comprobar que la ficción de Rachel Bloom, entre broma y broma, toca temas muy serios sin caer en la frivolidad y pone sobre la mesaasuntos que mucha gente prefiere no compartir con los demás por miedo o vergüenza. En este episodio hemos podido ver a Rebecca (Bloom) interactuando con un grupo de chicas adolescentes que presentan otro punto de vista de lo más interesante.
Teniendo en cuenta que Rebecca se mudó a una ciudad nueva persiguiendo a su ex-novio de la adolescencia podemos decir que la mujer sigue un poco estancada en esa edad en la que todo era drama y era difícil ver que la vida no giraba en torno al chico por el que tenías un «crush«. Así pues no es de extrañar que cuando Josh (Vincent Rodriguez III) va a un campamento para chicos con problemas ella no dude ni dos minutos en seguirle con la excusa de dar una charla sobre la fortaleza de las mujeres. El punto fuerte aquí es la terrible ironía a la que Rebecca tiene que hacer frente. Ella es, aparentemente, lo que a cualquier chica le gustaría ser: abogada de éxito, independiente, segura de sí misma… Pero la realidad es que no es oro todo lo que reluce y ella también tiene un crush sobre el que ha rehecho su vida. Lo bueno es que en esta segunda mitad de temporada al menos Josh parece hacerle más caso a la chica que al principio y es que él se está dando cuenta de que su novia es un poco especial y que Rebecca es una gran amiga para él.
Así pues avanzamos poco a poco hacia un acercamiento más evidente, que probablemente se produzca de cara al final de temporada. Lo que está flaqueando es la trama de Greg (Santino Fontana), nos hicieron shippearle con Rebecca para dejarnos ahora  a la espera de nuevos sucesos mientras vemos cómo le va con Heather (Vella Lovell) . Su trama en este capítulo ha resultado, esta sí, un poco tópica. Una chica joven a la que le encanta la independencia le pide compromiso a un chico con el que lleva saliendo solo unas pocas semanas y a él le entra el miedo. ¿Estamos hablando del mismo Greg al que le faltaban pies para ir a casa de Rebecca cuando ella le necesitaba? Mi lado shipper me dice que este es el motivo por ese miedo que le entra a Greg cuando Heather le pide ser exclusivos y es que se aleja así su posibilidad de tener una relación con Rebecca. Sin embargo, no podemos negar que esté bien que el chico pase página y no nos quedemos atrapados en un círculo vicioso de ‘crushes‘ y amores no correspondidos solo que… ¿ por qué Heather? ¿Por qué?
Por otra parte Darryl (Pete Gardner) está pasando por una crisis bastante grande y solo queire acercarse a los amigos de Rebecca, por lo que les invita a ver el boxeo y una posterior fiesta improvisada en su casa. ¿Quién iba a prever que de esta fiesta saldría otro ship más de la serie? White Josh (David Hull) y Darryl se han convertido en la nueva pareja de moda en tumblr y no es para menos porque de la nada nos han sacado una relación LGBT+ entre un musculitos de gimnasio y el abogado jefe de Rebecca, ¿no es estupendo? Habrá que ver cómo se desarrolla esta relación pero lo cierto es que pinta bastante interesante.
Volviendo a Rebecca y su «dramática» carta tenemos que admitir que Josh es un amor. El chico no se queda con las partes más ridículas de la carta de su amiga sino con lo que ella piensa realmente sobre él. Esto es necesario porque es una seña más de que los chicos también son inseguros, incluso los ‘cool boys‘ como Josh y es adorable ver que él también se da cuenta de quién le conviene más. Sin duda en este capítulo han querido hacer hincapié en la relación de las mujeres entre ellas y cómo se ha vuelto una constante intentar hundirse en vez de ayudarse. Así pues no queda muy claro si las chicas se han visto inspiradas de algún modo por Rebecca o si simplemente estaban siendo un poco ‘bullies‘ por guardar la apariencia de tipas duras y en el fondo siempre han sido las chicas que son conscientes de la importancia de ponerse siempre antes de un chico. Sabemos que Rebecca seguirá bebiendo los vientos por Josh pero al menos parece que él también empezará a beberlos por ella en algún momento. ¿A vosotros qué os ha parecido este capítulo? ¿Creéis que la segunda temporada de la serie está adquiriendo un toque más aleccionador que cómico? Dejadnos vuestros comentarios a continuación, aunque no os olvidéis de ver la promo del próximo capítulo.