Arrow 4×11: Shadowspire vs. A.R.G.U.S.

Una constante universal dentro de las historias basadas en personajes de cómic es la aparición más o menos regular de nuevas organizaciones insidiosas con ganas de ejecutar sus planes a pesar de la presencia de los justicieros de turno en la ciudad. Shadowspire es la más reciente de estas y sus actividades les llevan a tener un encontronazo directo con A.R.G.U.S., veremos cómo acaba esto.

Recordemos a todos que esta es la temporada de H.I.V.E. y de Damien Dahrk (Neil McDonough), que estos acaban de dejar en silla de ruedas a Felicity Smoak (Emily Bett Rickards) y que en el último episodio se han declarado un alto el fuego temporal antes de que este acabe con todo. ¿En qué gastar el tiempo hasta que los guionistas decidan que ya es suficiente? Pues en intentar conectar las tramas de los ‘flashbacks’ con el presente y darle un propósito al díscolo hermano de John Diggle (David Ramsey) que lo tenemos entre rejas para nada.

Más allá de introducir a John Constantine (Matt Ryan) en la continuidad de ‘Arrow’, no es que los ‘flashbacks’ hayan aportado demasiado esta temporada. Bueno, no es que hayan aportado demasiado nunca, pero el problema está siendo más acuciante si cabe este año. Así que qué mejor que traer a esos paramilitares que Oliver Queen (Stephen Amell) se encontró en Purgatorio en uno de sus múltiples retornos a la isla al presente y convertirlos en una amenaza paralela, no vayamos a tener pocos adversarios en juego al mismo tiempo.

Si en la isla tuvo el primer gran encontronazo con el Barón Reiter (Jimmy Akingbola), ahora le toca tenérselas tiesas con su organización Shadowspire. Aunque estos no parecen haberle mantenido en la memoria, a diferencia a de a los hermanos Diggle. Porque también estuvieron en Afganistán durante la campaña de la Operación Libertad Duradera y fue uno de los muchos grupos con los que el pequeño Andy (Eugene Byrd) contactó para ejercer su actividad favorita. No, no es el blackjack, es el tráfico de drogas.

Y como no puede haber una nefaria organización sin una agenda oculta, aquí llega el objetivo a evitar por parte del Equipo Arrow de la semana: el robo del dispositivo de A.R.G.U.S. conocido como Rubicón. Qué es, no lo sabemos, pero parece tener el potencial para poner patas arriba la sociedad norteamericana. Quién no querría algo así. Por supuesto tal objetivo es evitado a tiempo por los protagonistas, faltaría más, pero no sin antes asistir por el camino a la «muerte» de Amanda Waller (Cynthia Addai-Robinson).

Las comillas son preceptivas porque la muerte en este tipo de series es relativa y, normalmente, de corta duración. Además, en un fallecimiento tan gratuito como el presente de un personaje tan conocido por sus habilidades para el engaño y el enmascaramientos de planes, se nos hace pensar que no se tardará demasiado en volver a verla por aquí. Eso, o The CW no ha querido dar demasiada pompa y circunstancia al hecho de que se tiene que quitar de encima con urgencia a todos los personajes coincidente con la próxima en el tiempo película del Escuadrón Suicida.

Lo que si ha tenido pompa, circunstancia, gravedad y hasta exageración ha sido la recuperación mental de Felicity en su rol de hacker y directora de operaciones del grupo. Como buena Mary Sue de la serie no ha tardado demasiado en ponerse al día con su nueva condición de minusválida, pero entre medias ha tenido tiempo para sacarse una personalidad disociada – de alguna forma tenían que traer de vuelta el look Lisbeth Salander del personaje que resultase medianamente justificado – y hacer que esta desaparezca. Quién necesita psicoterapeutas habiendo villanos que vencer con urgencia.

Porque si tomamos como referencia la promo del episodio siguiente, todas las dudas e inseguridades que pudiese tener a raíz de un hecho traumático como un intento de asesinato que resulta en paraplejia desaparecen en cuestión de cuarenta y dos minutos para no volver más. Hasta podrá lucir el chulo nombre en clave de Overwatch, ahora que Diggle ya se ha afianzado en el de Spartan y que Oracle también está cogido por una película de DC Entertainment y Warner Bros., que ‘Batman v. Superman: Dawn of Justice’ está muy cerca.

La semana que viene, más. Y esperemos que mejor.

 

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Capitán Valverde
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